
Me he planteado iniciar una serie de entregas de fotos curiosas sacadas aquí y allá (muchas de ellas, como las anteriores, en China). Esto no quiere decir que abandone mis crónicas viajeras ni las de situaciones cotidianas, ni los montajes con fotos para enviaros al pasado. Que ya os veía yo frotándoos las manos. La primera perla de esta nueva serie de entregas está sacada, como no podía ser menos, en Shanghai. He de decir que cuando ví esta imagen mi cabeza se llenó con una musiquilla... como era... sí: "guitarra, guitarra, contigo las horas se van" y después con otra: "yo me dormía y al rato moría por estar ausente de tí..." El caso es que, fuera como fuera, mirando la extraña decoración de esta tienda (incluyendo el empanelado en rojo y amarillo.......), Los Pecos no me abandonaban. Y creo que sé por qué. ¿No hay un parecido asombroso?

Esta foto está tomada en Taihuai y en ella traté de mimetizarme con el personal local sin demasiado éxito a lo que se ve porque sé perfectamente que yo soy la segunda empezando por la derecha.

En un país superpoblado... superpoblación hasta en los estanques. Así estaba uno de Shanghai. Daba un repelús......

Y esta, dedicada a Elena, para que veas cómo se las gastan los chinos con sus animales de compañía. Está sacada en Pingyao y estas dos mujeres estaban decididas a no dejar pulga viviente en la pelambre de sus mascotas. Con lo poco que les gusta el agua a los pobres gatos...
Y hasta aquí la primera entrega de fotos curiosas. En la próxima, ni más ni mejor porque es imposible (que diría el Gran Wyoming).
Hala, muas, muas.
1 comentario:
Mecachis, con lo cómodo que es el canstén....
Admito que todos mis gatejos han pasado por la misma tortura....
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